Preparadao por Nam Hari Kaur de USA y traducido por Guru Kirat Kaur
Septiembre revela un
tiempo de sensibilidad intensificada en áreas de amor, el hogar, y nuestra
percepción de justicia y el juego justo.
Si alguien olvida descargar el lavaplatos y
recoger tu comida favorita del mercado en el mismo día, podrías empezar a
pensar, “Esto es tan injusto, ¿Cómo podría él/ella ya no amarme?”
Una abeja en tu sombrero
Un saludable sentido del humor es un buen
punto de balance a cualquier reacción emocional exagerada que puedas
experimentar, ya seas tú o la otra persona quien se está desmoronando. Será excepcionalmente desafiante mantenerse neutral en
este ciclo, teniendo la presencia de dobles 13 en el cálculo del Corazón. El
número 13 puede ser muy rápido para juzgar una situación, y con el número 9
(mes) presente en la ecuación, pueden haber situaciones con reacciones
exageradas del tipo “¡Tienes una abeja en el bonete!”.
El número 9 representa asuntos de paciencia,
sutileza y realización. Lo que nos es difícil de completar o comunicar tendrá
una tendencia a “pasarse de asado”. El punto de inflamación de Septiembre puede ser alcanzado
en un nano-segundo, así que tu acercamiento hacia la vida necesita ser estable
e intuitivo. Tu intuición es tu mejor amiga y más querida Ángel Guardián
en estos tiempos que cambian tan rápido. Comienza desarrollando una relación
consciente con este centro superior preguntándote a ti mismo la pregunta, “¿Qué
tiene para decir mi intuición sobre esto?”
Espera hasta que ya no quede duda
Una buena regla de oro para Septiembre es,
“¡Espera hasta que no quede duda!” Habrá una tendencia de la gente de querer
resultados rápidos, y esta fuerza emergente e impetuosa puede llevarte a una
zona de peligro de la que puede ser difícil salir. Esto ocurre cuando el número
9 cambia a la polaridad negativa, creando escasez de paciencia y tolerancia. No te dejes arrinconar en compromisos u obligaciones
hasta que estés completamente seguro de entender los parámetros de a lo que
estás metiéndote.
La información necesaria puede ser algo
parcial o nebulosa de a momentos. Parte de la razón para esto puede ser no
intencionada de parte de alguien, pues otro aspecto de estos tiempos es una
tendencia hacia la distracción. Si lo quieres por aquí, ¡lo tienes que
escribir! La gente de las notas adhesivas “Post-it” me amarán por este consejo.
Encuentra las piezas perdidas
Un interesante aspecto
de Septiembre será un deseo incrementado de encontrar aquellas piezas perdidas
de los deseos de nuestro corazón. El nueve es el número
del misterio, ¡y estamos buscando nuevas respuestas! Similar a un rompecabezas
con un puente o un molino sin terminar, nos encontraremos aventurándonos con
una actitud de búsqueda de “Debo tener la imagen completa para disfrutar,
¿Dónde están las piezas faltantes?” La verdadera respuesta es que las piezas
perdidas nunca se fueron realmente; tú simplemente no las notaste refugiadas en
tu corazón. Cuando dejamos de requerir o demandar a otras personas el ser esa
elusiva pieza faltante del puzzle, las cosas caerán con mayor naturalidad en su
lugar. El hombre de hojalata del clásico “El Mago de Oz” siempre tuvo un
corazón, él sólo necesitaba de alguien que le importara profundamente de modo
de sentirlo latir. Cuando damos a otros aquello que estamos buscando, todos
salen beneficiados.
Resucitando tu Energía de la Fuente
Es importante ahora el ver el significado
espiritual más alto del número 13. Estamos en el año calendario de 2013, y este
mes de Septiembre lleva un 13 en el cálculo del Corazón. Trece es el número de la resurrección; sin embargo, para
que haya una resurrección, algo debe morir primero. Individualmente, y
como humanidad estamos lidiando con asuntos emocionales que son frustrantes y
algunas veces confusos. “¡Si tan sólo
fueras de esta manera!” es un sentimiento común en nuestro paisaje emocional.
Esto crea una situación donde nuestro bienestar emocional es mantenido de rehén
por el comportamiento de otra persona. No es divertido. Estamos en un punto de evolución emocional donde es necesario que nos
liberemos de los guiones negativos que rodean las expectativas entre nosotros. La
paga es que a través de la muerte del antiguo ser, la relación con nuestra
energía del origen es restablecida. “Dios y yo, yo y Dios, somos uno.” Ang
Sang Wahe Guru.
“Yo en ellos, y tú en mí, para que sean
perfectos en unidad.” Juan 17:23.
Este es el tiempo de transición donde el
patrón entrelazado de nuestro “viejo ser” puede morir, permitiendo así que el
Alma emerja; resucitada de las cenizas de todo lo que no funcionaría jamás en
nuestras vidas.
Se paciente contigo
mismo, y da a aquellos que te rodean acres de espacio emocional para procesar y
liberar por lo que están pasando. Recuerda el poder de la
palabra, pues es en el número 13 en su máxima frecuencia – el poder de
bendecir.
En las palabras de Yogi Bhajan:
“Cuando hablas
desde el corazón, tú gobiernas; cuando hablas desde la cabeza, tú destruyes.”
Permitámonos conscientemente acoplarnos con esta intención superior, y
resucitarnos a una frecuencia de ser que es infinitamente amable y graciosa
para todos. Sat Nam.
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